No tendría sentido comenzar la crónica como un día normal, porque el municipio del Vero ha vivido algo sin precedentes. La UD Barbastro ha hecho historia y ha vencido a la UD Almería por 1-0 en la Segunda Fase de la Copa del Rey. El encuentro ha tenido lugar en un abarrotado Municipal de los Deportes -en torno a tres mil espectadores-, que se vistió de gala, como nunca antes, para recibir a todo un coloso, la UD Almería, un equipo de la Primera División española, la élite.
Desde la mañana, el nerviosismo afloraba en las casas barbastrenses. Aficionados de toda la vida, amigos, padres, hijos, abuelos y nuevas generaciones se acercaron a la previa organizada por el propio club en los aledaños del estadio con ese sentamiento de «¿y si sí?». Para muchos una locura, para otros, algo viable, pero la UD Almería se emergía con el rival más asequible entre los posibles debido a su dramática situación para los humildes rojiblancos.
Pablo Sig, aficionado rojiblanco de la toda la vida, afirmaba que «no es el partido de la temporada, es el partido de la historia» antes del encuentro. Además, reconocía que había «dormido, pero no mucho» fruto de los nerviosos que despertaba la cita. «Ha habido veces que ha sido duro venir al campo. Ver poca gente, la afición callada y el equipo dando poco y ahora vemos a un equipo de primera división entrando en nuestro campo», sentenciaba.
Mientras tanto, en la otra cara de la moneda, se atisbaba cierta prudencia, pues el Almería no está pasando su mejor momento. Juanjo, aficionado de la UD Almería, reconocía que «a ver si levantamos la cabeza, hoy es un buen día para hacerlo» antes del inicio. «Hoy pasaremos, seguro», comentaba el aficionado del Almería.
Rafael Torres afirmaba que estaba viviendo «una mezcla de ilusión y nervios». De la misma manera, se enorgulleció de sacar a flote su «proyecto no solo deportivo, sino de la ciudad». A su vez, reconoció que durante «los últimos partidos estamos haciendo muy buen fútbol y sacando puntos». «Yo soy realista, vamos a jugar contra un primera división, lo normal es que nos ganen, pero no sería la primera vez que un pequeño gana a un grande», mencionaba.
Comienza el partido
Con estos ingredientes, llegó el gran momento, los protagonistas saltaron al terreno de juego. David contra Goliat, UD Barbastro contra la UD Almería. En una mañana histórica para la UD Barbastro, el equipo del Vero demostró su calidad y determinación al enfrentarse a la UD Almería en un emocionante encuentro de la Copa del Rey. Desde el inicio, los jugadores locales mostraron seriedad y determinación, resistiendo los intentos de la UD Almería de imponerse en el partido.
La afición rojiblanca se hizo sentir gradualmente, apretando cada vez más a medida que transcurrían los minutos. La defensa del Barbastro se erigió como un muro infranqueable, destacando la actuación clave de los centrales que lograron reducir los ataques del equipo rival.
En el minuto 28, Franki Tarifa escribió su nombre en la historia del club al anotar un gol de cabeza a balón parado, gracias a una precisa asistencia de Mingotes. Este gol se convertiría en un hito para la UD Barbastro, desatando la euforia en el Municipal de los Deportes.
Mientras tanto, los esfuerzos de Centelles, Lopy y Lázaro en el ataque almeriense por la banda izquierda no lograron materializarse, gracias a una defensa bien organizada. El portero Fábrega se erigió como figura decisiva, repeliendo con astucia cada intento de los jugadores rivales.
El Almería intentó aprovechar las bandas y las jugadas a balón parado, pero el Barbastro jugó sin complejos, demostrando ser un rival a la altura. Al llegar al descanso, el marcador favorecía al equipo local.
A la vuelta del descanso, se percibió una disminución en el ritmo de juego. A pesar de ello, el Barbastro tuvo oportunidades notables, como en el minuto 82, cuando a Mariño se le escapó un balón de las manos al que Soule no pudo llegar.
En el minuto 92, la UD Almería tuvo la oportunidad de empatar, pero se encontró con una sólida defensa que repelió el peligro por alto. Con el pitido final, el Municipal de los Deportes estalló de alegría, y los jugadores se acercaron a la grada para celebrar con su afición.
Franki, héroe rojiblanco
Al término del partido, Franki, héroe del partido, afirmó que estaba viviendo «un sueño» porque lo que había sucedido era «impresionante». De la misma manera, comentó que «nunca había vivido algo así, pero es una pasada». Además, al ser preguntado sobre si era su mejor momento como futbolista, confirmó que «sí, posiblemente sí».
Abrazos, lágrimas y besos se hicieron presentes en las gradas. Así, se marcó el cierre de un día histórico para la UD Barbastro, que una vez más superó una ronda más en la Copa del Rey. La hazaña quedó grabada en la memoria de los aficionados y jugadores, consolidando la posición del Barbastro como un equipo a tener en cuenta en la competición.
