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Somontano Alquila da una nueva vida a las casas vacías

El programa Somontano Alquila estimula la oferta de viviendas en el medio rural

Somontano Alquila
El técnico de Somontano Alquila, Manel Lorente, durante una charla informativa del programa en Naval. Foto: S.E.
Pablo Alvira Fuertes Alvira Fuertes
23 octubre 2021

La lucha contra la despoblación va de la mano de estimular la oferta de viviendas y el alquiler, muy escasa en los pueblos. El proyecto de cooperación Somontano Alquila tiene esto como objetivo. Se trata de una herramienta dirigida a propietarios. Los que tienen su casa vacía o en desuso para ponerla en una bolsa de alquiler y ofrecerla a nuevos pobladores. En los siete meses que lleva en funcionamiento, se han realizado siete contratos de arrendamiento: tres en Radiquero, dos en Pozán de Vero y uno en Castillazuelo y El Grado. A día de hoy, hay 11 localidades con 18 viviendas disponibles en la bolsa de alquiler del programa. Adahuesca, Bierge, Peralta de Alcofea, Berbegal, Radiquero, Laluenga, El Grado, Alquézar, Lascellas, Castillazuelo, y Pozán de Vero.

La mecánica de funcionamiento de este programa es muy sencilla. Los técnicos y técnicas asesoran e informan a los propietarios en el proceso de búsqueda de los inquilinos y en la formalización del contrato de alquiler. «Queremos sacar un rendimiento a esas casas que no se usan y tampoco están en el mercado. Además de facilitar el asentamiento a los nuevos pobladores», indica Nuria Gil, técnica del área de Desarrollo de la Comarca del Somontano.

«No somos una inmobiliaria»

El precio medio de estos alquileres ronda los 300 o 400 euros y se redactan contratos libres entre propietario e inquilino. «El balance que hacemos es que hay mucha complejidad para cambiar de vida. Las familias que encontramos lo tienen muy claro. También nos encontramos con la realidad de que muchas casas necesitan rehabilitaciones», añade Gil. En ese sentido, un gabinete de arquitectura presta servicios para hacer informes de la situación de las propiedades y tramitar los pertinentes certificados eléctricos. 

María José Perera, también técnica del área de Desarrollo comarcal, asegura que «una casa en el medio rural sin nadie dentro solo da gastos y al final acabará en ruinas». Desde la Comarca, aseguran que a raíz de la pandemia han recibido más llamadas. Los hay quienes no encajan con el perfil, ya que no se busca un inquilino que lo use como segunda residencia o lugar de trabajo, sino que se buscan familias con hijos e hijas. «Somontano Alquila no es como una inmobiliaria o un alquiler social. Buscamos un doble objetivo: dar una nueva vida a la vivienda y asentar población. Buscamos familias con posibilidad de que encuentren trabajo porque además se les asesora en ese sentido. Gente que lo tenga claro y lo llevan madurando mucho tiempo, porque si se lo piensan tardan mucho», explica Perera. 

Somontano Alquila
El técnico de Somontano Alquila, Manel Lorente, durante una charla en Naval. Foto: S.E.

Charlas informativas

Las presentaciones del proyecto ‘Pueblos Vivos’ y del servicio ‘Somontano Alquila’ están «a mitad de ciclo». Castejón del Puente, Naval, Estadilla o Peralta de Alcofea, entre otros, ya han recibido la visita de los técnicos para informarles. Se expone, además, una línea de trabajo para incidir en la facilitación de empleo para nuevos pobladores. Este proyecto inmobiliario está financiado por el CEDER Somontano con una ayuda LEADER a través de los fondos FEADER (Unión Europea) y del Gobierno de Aragón.

La DGA impulsa ayudas

El consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda del Gobierno de Aragón, José Luis Soro, anunció una línea de ayudas para la adquisición de viviendas en el medio rural para jóvenes menores de 35 años. Podrán optar a estas ayudas aquellas personas que obtengan la vivienda. O quienes la hayan obtenido desde enero de 2021 hasta el final de la convocatoria, el mes que viene. Está dotada con 1.229.118 euros y cada solicitud podrá optar a una financiación de hasta 10.800 euros, y en cualquier caso no será superior al 20% del precio de compra del inmueble.

Las viviendas adquiridas deberán ser residencia habitual, cuyo precio de compra no podrá superar los 100.000 euros y ubicadas en municipios de menos de 5.000 habitantes. Además, los beneficiarios deberán contar «con unos ingresos mensuales igual o inferior a tres veces el IPREM 1.694 euros». Esta convocatoria es complementaria a la que destina 1,8 millones de euros a la compra de vivienda por parte de los ayuntamientos para destinarla a alquiler asequible, cuyo plazo todavía sigue abierto.

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