Jornada imborrable en Bono. El 60 aniversario de la riada del 3 de agosto de 1963 llenó Bono de recuerdos. Este núcleo del Ayuntamiento de Montanuy, con tres vecinos de manera permanente, acogió a más de 70 personas. Llegados de otras poblaciones cercanas y desde Lérida, Barbastro o Barcelona quisieron recordar este suceso. Se reunieron descendientes, hijos y nietos de aquellos que hace décadas habitaban Bono y para quienes la riada significó un duro revés a las economías familiares. La tromba del barranco y la riada del Noguera Ribagorzana arrasaron casas, huertos y campos de cultivo.
Bajo el nombre de Bono es trobada se celebró el encuentro. El primer paso fue celebrar una misa en la iglesia de Sant Pere. Continuó la tarde con una conferencia acerca de la riada. Aquí, el historiador Joan Ramón Piqué, gran conocedor de la historia del valle de Barrabés, pudo contar con los testimonios de vecinos que vivieron en la localidad hace 60 años. De entre todos, Pepita Porté de Casa Riu; Laura de Casa Carlà y Antonio García de Casa Sastre ofrecieron un valioso testimonio de cómo transcurrió una noche tan aciaga.
Una cena y un animado baile cerraron este día lleno de emociones para todos los asistentes algunos de los cuales llevaban décadas sin verse.