Ya en casa, en Barbastro, y después de casi una semana concentradas con la Selección Aragonesa sub 15, Martina Alastuey y Paloma Garriga todavía están asimilando lo que lograron hace unos días. Junto a sus compañeras, se proclamaron campeonas de la Fase Plata sub 15 con la Selección de Aragón después de vencer en la final a Castilla-La Mancha (1-2).
Paloma Garriga todavía no es «del todo consciente” de lo que han conseguido. «La verdad que es difícil de creer, pero no imposible de vencer. Estamos en una nube”, asegura.
La concentración en tierras murcianas se inició un jueves y la final se disputó el miércoles 8 de junio. Fueron demasiados días fuera de casa cuando todavía no se ha acabado el periodo lectivo. Sin embargo, Garriga valora la “gran familia que hemos construido. Ellas eran las que te hacían olvidar cuando echabas de menos a los tuyos. Todas son geniales”.
Aunque ha tenido más protagonismo saliendo desde el banquillo, la jugadora afirma haberse “sentido bien ya que he jugado en todos los partidos, ya sea más minutos o menos. Mi entrenador Jandro confiaba en mí. Todo esto se ha logrado con esfuerzo y pasión”, resalta. A Martina también se le hace «difícil asimilar la victoria, ya que Aragón nunca había conseguido nada”. La pichichi de la Ferranca se muestra “contenta y orgullosa” de lo conseguido en tierras murcianas.
Para ella, la estancia no ha supuesto «ningún problema, pues nos lo hemos pasado genial y entre las del equipo, tanto con la sub 17, nos llevamos muy bien. Ha sido un sitio muy bonito y agradable, nos lo hemos pasado de maravilla”.
Alastuey es exigente consigo misma a pesar de contar con muchos minutos en el torneo: «Ha habido partidos que no he jugado como sé o como podría haberlo hecho, pero me he sentido cómoda, segura y ligera en el campo. En general, con las compañeras he estado súper a gusto y ya hemos pasado de ser un equipo a ser una familia”.
La Aragón de Alastuey y Garriga, campeona de la Fase Plata sub 15
