Barbastro

La subida del precio del papel toma protagonismo en la vuelta a las clases

Los libreros de Barbastro coinciden en que no es necesario gastarse demasiado dinero en material escolar y recomiendan comparar precios

precios
Lucia Abadias Abadías López
20 septiembre 2022

El aumento de los precios se está dejando notar en todos los bolsillos desde hace ya unos meses. La vuelta a las clases supone un septiembre de gastos en librería y papelería que no se lo está poniendo fácil a muchas familias, ya que no pueden prescindir de gran parte de estos materiales.

El principal causante de este incremento es el papel, y su tan nombrada escasez. De hecho, el Instituto Nacional de Estadística (INE) calcula un aumento del 4’4% en la fabricación de artículos de papel y cartón entre 2020 y 2021. Después, los precios son una reacción en cadena. Por ejemplo, los cuadernos han subido hasta un 20%, tal y como afirma Víctor Castillón, presidente de la Asociación de Librerías de Huesca y propietario de la librería Castillón de Barbastro. No obstante, destaca que llevaban alrededor de seis años sin subir. También habla de un incremento del 8% en libros, dependiendo de la editorial. Otro ejemplo es el del 10% más en las carpetas de anillas.

DATO

20%

ha subido el precio de los cuadernos de papel.

“Nosotros ya nos ajustamos, intentamos que el cliente no sienta la repercusión total de la subida, buscar calidades similares con precios más bajos. La alternativa a los cuadernos con tapa de cartón pueden ser, por ejemplo, los de tapa de plástico, donde no se ha notado tanto la subida”, declara Víctor Castillón.

La situación es diferente con el resto del material de papelería, donde la subida apenas se ha notado. “El precio que tenemos será el mismo ahora que dentro de tres meses cuando vengas a reponer”, asegura Beni Ibor, de la librería Ibor. Gerardo Encinar, de la librería Moisés, coincide: “No es ninguna exageración, no son relevantes los cinco céntimos que pueden haber subido algunos bolígrafos”.

Calidad del producto

La calidad del producto es también un factor determinante en varios sentidos. Las mochilas han subido sus precios, pero algunas marcas superiores los mantienen. Por lo general, Castillón asegura que la gente cada vez busca más calidad.

“En el colegio te mandan materiales con determinadas marcas y no es que sean caros, es que son buenos. Esto es lo que nos diferencia de otros establecimientos que tienen productos más baratos, pero que no cuidan su calidad”, afirma Ibor. Añade que antes los productos de papelería solo los vendían ellos, pero que ahora todo está más repartido: “Estamos tocados por todos lados”.

Los libreros recomiendan hacer una comparativa de precios y gastar hasta donde se pueda. Están de acuerdo en que no es necesario gastarse 500 euros en la vuelta al cole.

Bancos y becas

Los bancos de libros en los diferentes centros de educación infantil, primaria y secundaria se unen a las ventas de segunda mano y hacen caer en picado las ventas en las librerías. Cuantos más libros nuevos, mejor para las pequeñas librerías. Es por esto que el año que viene se prevén más ventas dado que el cambio en la legislación educativa (Lomloe) solo ha entrado en vigor este año para los cursos impares. De cara al año que viene, será la totalidad de alumnos la que cuente con nuevos libros de texto.

Yolanda Raso, de la librería Rayuela, afirma que hay cada vez más gente que opta por estos bancos de libros en detrimento de las becas “porque con el dinero que dan no les llega”.

Hace años que los libreros ponen en duda el funcionamiento de estas becas. Los beneficiarios van a sus establecimientos y se llevan el equivalente al importe de la beca en libros de texto, pero no pagan nada, ya que quienes adelantan el dinero son los propios libreros. De hecho, normalmente no cobran ese dinero por parte del estado hasta el mes de mayo. Yolanda Raso habla de cantidades que oscilan entre los 6.000 y los 12.000 euros.

“Tenemos un negocio y un trabajo complicadísimos”, asevera Yolanda, de Rayuela, mientras cuenta el “puzzle” que es montar lotes de libros, por los que tardarán meses en obtener su beneficio.

Beni Ibor lanza un mensaje claro: “Vamos a ser sensatos, el libro de física vale 40 euros, pero, ¿y unas zapatillas? Más baratos son los libros”.

Suscríbete aquí a nuestra nueva newsletter

Leer más
Más en Barbastro