Las obras de rehabilitación de la sala Florida han finalizado y por fin ha vuelto a abrir sus puertas para el público tras dos décadas. La inauguración oficial se celebró el pasado sábado 14 y a ella asistieron, según la organización, más de 600 personas, completando el aforo de esta renovada instalación.
El alcalde de Fraga, Ignacio Gramún, presidió el acto que contó con la presencia de la consejera de Educación, Cultura y Deporte, Tomasa Hernández. A la cita también acudieron autoridades autonómicas, provinciales y locales, la familia Arnau (cedente del local durante 65 años), empresas y técnicos que participaron en el proyecto de rehabilitación, así como multitud de vecinos.
La jornada, además de los discursos institucionales, incluyó la actuación de magia de El Mago Invisible. Esta se convirtió en el primer artista en actuar en esta sala tras su rehabilitación.
La renovada sala Florida
En su discurso, el alcalde de Fraga, Ignacio Gramún, se refirió a la recuperación de la Sala Florida como «un verdadero proyecto de ciudad necesario e imprescindible para una población como Fraga». «Recuperar la Sala Florida es dar un salto cuantitativo y cualitativo enorme a nivel cultural», afirmó.
El primer edil ensalzó que «Fraga está viviendo un momento histórico. Se están realizando proyectos de gran envergadura con más de 13 millones de euros de inversión». «Para continuar con estos proyectos debemos estar unidos. De lo contrario, si nos dispersamos, si nos fragmentamos, si no remamos en la misma dirección, Fraga se estancará y dejará de ser una de las principales potencias de Aragón».
Por su parte, la concejal de Urbanismo, Esther Rubio, explicó que «recuperar este espacio no ha sido solo una cuestión de planos y reformas. Ha sido sobre todo un acto de respeto y cariño hacia lo que este lugar representa para muchas personas».
A su vez, añadió que «reabrir el cine es también apostar por la cultura como motor de vida, de identidad y de unión. Es devolverle a la ciudad un espacio donde emocionarse, reflexionar, compartir». Por otro lado, reflexionó en que «el hecho de que se encuentre en una de las zonas más emblemáticas de nuestra ciudad, el casco antiguo, no es casual».
Juan Arnau, por su parte, valoró que “la cultura, cuando se convierte en un bien público y accesible, no solo nos transforma, nos conecta con los demás y con nosotros mismos. Y, en estos tiempos en los que todo parece fragmentado, apresurado y personal, un lugar como el Florida tiene más sentido que nunca».