La Diputación Provincial de Huesca, con el objetivo de mejorar los tiempos de respuesta de su Servicio de Prevención y Extinción de Incendios (SPEIS), proyecta un nuevo parque de bomberos que se ubicará entre Monzón y Binéfar. Mientras, se emprenden obras en las actuales instalaciones en Monzón, en donde una dotación de bomberos paliará esos tiempos de respuestas, especialmente en la zona más oriental de La Litera.
Monzón ha sido el lugar elegido para presentar la nueva reorganización del SPEIS en la zona oriental de Huesca. Caber recordar que a finales de 2020, la capital mediocinqueña perdió su parque al ponerse en marcha este servicio profesional de bomberos a principios de 2021. La reorganización propuesta entonces por la DPH consistía en el cierre del parque de Barbastro y la construcción de uno nuevo en Castejón del Puente.
Isaac Claver, presidente de la Diputación y alcalde de Monzón, ha recordado en la presentación cómo se manifestaron en contra del cierre de la instalación en su ciudad, «la segunda en población de Huesca y con un importante riesgo químico».
El parque de bomberos entre Monzón y Binéfar
Ahora, se ha cambiado de planteamiento. Continuará abierto el parque de bomberos de Barbastro y se construirá uno nuevo en un terreno por determinar entre las ciudades de Monzón y Binéfar. «Lo hacemos con criterios técnicos, no políticos», ha subrayado Claver. El objetivo, mejorar las isozonas; es decir, los tiempos en los que el SPEIS puede atender una emergencia desde uno de los siete parques de la provincia.
De este modo, han explicado que el 30 por ciento del territorio se encuentra a cinco minutos de reacción de un parque de bomberos; el 60 por ciento a 15 minutos y el 92 por ciento, a 35 minutos, el máximo que marca la ley. Con el nuevo parque de bomberos entre Monzón y Binéfar, el tiempo de respuesta de cinco minutos pasaría al 40 por ciento del territorio; a 15 minutos el 75 por ciento y a 35 minutos el 98 por ciento. «Esto nos situaría a la cabeza de España», ha resaltado el presidente provincial. «Los bomberos son un servicio esencial y lo demostramos con hechos», ha añadido.
Óscar Aguarta, jefe del SPEIS, ha abundado en esta mejora de tiempos. La provincia de Huesca cuenta con 15.600 kilómetros cuadrados, con dos importantes zonas de desarrollo industrial (en torno a Sabiñánigo y Monzón). En el eje Somontano-Cinca Medio-Litera, se atiende a 70.000 habitantes, el 44 por ciento de la población de toda la provincia.
«El objetivo es que desde el Servicio seamos capaces de atender en 15 minutos al 75 por ciento de la población», ha abundado. Y ha reiterado que estos parámetros «nos ponen a la cabeza de España en servicios rurales», ha abundado Aguarta. Aguarta también ha destacado la formación y la dotación con la que cuentan los 167 bomberos que forman parte del SPEIS. Ha dsetacado la unidad del vehículo de riesgos tecnológicos o los del jefe de mando. «Un servicio moderno», ha incidido.
Recuperar el parque de Monzón
De manera transitoria, hasta que se construya el parque de bomberos entre Monzón y Binéfar, se van a activar las instalaciones ubicadas en la capital mediocinqueña. Ya se han adjudicado las obras por 40.000 euros para acondicionar los espacios. Ahí habrá durante 24 horas una dotación de bomberos (jefe y dos bomberos) mejore los actuales tiempos de respuesta. Una apertura que podría estar lista en cuatro o cinco meses y que va a suponer una ampliación de plantilla del SPEIS.
Para el nuevo parque de bomberos, que supondrá una inversión de unos tres millones de euros, se está en la fase de buscar terreno. Acogerá entre 10 y 15 bomberos.
