Tras ser aprobado en el Consejo comarcal, la Comarca de La Ribagorza ha presentado su segundo Plan Comarcal de prevención de adicciones. El objetivo es concienciar y prevenir ante el riesgo social que suponen las conductas adictivas a las personas afectadas y su entorno familiar y social.

El nuevo plan se prolongará hasta el año 2026 y, además de la Comarca, intervienen otros agentes, como la Asociación de Familias contra las Drogas, Caritas y Cruz Roja, así como los centros educativos del territorio.

Esther Cereza, consejera de Acción Social de La Ribagorza, explica que el plan se fija en «la prevención como herramienta para paliar la proliferación de viejos consumos y de los nuevos, adicciones al juego o nuevas tecnologías». Y es que todos ellos «se han acentuado con la sensación de soledad añadida en estos años de incertidumbre».

Con este plan se promueve la difusión de campañas orientadas al consumo responsable en la que se participa. También se ahondará su efecto en el ámbito de las adicciones en el entorno laboral. En este sentido, se reforzarán actuaciones ante la realidad de nuevas actitudes adictivas. En concreto, hacia el abuso de las pantallas y el ocio interactivo.

María José Gil, coordinadora del Centro de Servicios Sociales de la Comarca, señaló que el objetivo es «seguir incidiendo en la prevención de adicciones comportamentales relacionadas con el juego y las apuestas, el uso compulsivo de internet con fines lúdicos o el uso abusivo de videojuegos».

Actuaciones del plan de prevención

El calendario de actuaciones de este Plan de prevención de adicciones de Ribagorza todavía no está concretado. Sin embargo, ya se sabe que mantendrá la jornada de prevención anual, que reúne a expertos y profesionales del territorio que afrontan la lucha contra los consumos. Una jornada cuya última edición se celebró en Benabarre con profesionales como Jaume Funes, Jordi Bernabeu y César Bona.

Este segundo plan de prevención de adicciones quiere mantener el foco sobre la juventud. Las estadísticas alertan del inicio cada vez más temprano de estos comportamientos dañinos. Gil explicaba que «actuar en el ámbito educativo, formal e informal, es prioritario». Y es que es una puerta de entrada «para capacitar al alumnado en la toma de decisiones, crítica y responsable, con relación al consumo de drogas y otras conducas adictivas».

La Comarca de la Ribagorza, en este sentido, valora positivamente la experiencia piloto del programa ‘Juega Vive’. Una veintena de ribagorzanos se involucró en una intervención desde el ocio saludable, ideada desde la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito.