El obispo Ángel Pérez Pueyo ejercerá de mantenedor de las fiestas de Barbastro de 2025. Así lo han anunciado el alcalde de Barbastro, Fernando Torres, y la concejal de Fiestas, Lorena Espiérrez, en la tarde de este miércoles, 25 de junio.
La concejal, tras repasar su carrera profesional, ha cedido el paso al alcalde quien ha anunciado el nombre del mantenedor de este año. Pérez, visiblemente emocionado, ha agradecido al Ayuntamiento este cargo y a los medios de comunicación su presencia.
El discurso del mantenedor de las fiestas de Barbastro de 2025
Pérez ha comenzado su discurso confesando que «cuando el alcalde y la concejala de festejos me propusieron ser el mantenedor de las Fiestas de Barbastro 2025, mi primer sentimiento fue pensar que se estaban quedando conmigo».
No obstante, «hoy, al presentarme ante vosotros, y sentir en vosotros el corazón de nuestra gente, comprendo que su propuesta no era una locura. Es cierto, la vida es fiesta o no es nada. Cuando el autor sagrado en la Escritura nos quiere hacer entender el cielo, lo representa como una gran fiesta o un opíparo banquete».
En su discurso ha nombrado a los anteriores mantenedores declarando que «este cargo es un honor inmerecido, sobre todo cuando uno mira la talla humana y profesional de quienes me han precedido en este papel».
También ha dedicado un pensamiento para los jóvenes: «Hoy, nuestros jóvenes también viven en dos tiempos: el finde y el curro el resto de la semana. Pero todos, mayores o jóvenes, seguimos necesitando la fiesta auténtica: la que nos humaniza, nos dignifica, y nos hace reencontrarnos con los demás y con nosotros mismos. También con Dios».
Pérez ha confesado que no sabe si sabrá estar a la altura, «pero sí os prometo que pondré el alma para que este año las fiestas de Barbastro brillen con luz propia y no vivamos unas fiestas enlatadas. Todos en la calle. Que cada barbastrense sienta que su corazón late junto al vecino, al amigo o al hermano».
Por último, ha recordado la figura de san Ramón y ha animado a celebrar estas fiestas «no como evasión, sino como mediación para reconocernos mejor. Para hacer visible, como decía San Ramón, el regalo de Dios: respetarnos, querernos, ayudarnos. Y así, desde dentro, transformar el mundo con alegría compartida».
La trayectoria de Ángel Pérez Pueyo
Ángel Pérez Pueyo nació en Ejea de los Caballeros hace ya casi 70 años y vive en Barbastro desde hace más de diez. Estudió Magisterio en la Escuela Universitaria de Formación del Profesorado de EGB Virgen del Pilar de Zaragoza y, después, inició Estudios Eclesiásticos en el Centro Regional de Estudios Teológicos de Aragón.
En 1977, cuando tenía 21 años, se trasladó a Salamanca para completar sus estudios en la Universidad Pontifica. También en Salamanca realizó estudios de Filosofía y Ciencias de la Educación. Tres años después, en concreto un 19 de marzo de 1980, fue ordenado sacerdote en Plasencia (Cáceres) y empezó a trabajar como formador en dicha Diócesis. Al poco, lo destinaron a Tarragona, donde desempeñó tareas formativas en el Colegio-Seminario de la ciudad hasta 1985.
Durante la segunda mitad de los 80 recibe el cargo de rector del Aspirantado Menor de Salamanca y tutor del Colegio Maestro Ávila. Ya en los 90, comenzó a coordinar cursos para formadores de seminarios que se impartían en diferentes ciudades hispanoamericanas como Buenos Aires, Caracas o Lima y llegó en 1994 a participar en el I Congreso Continental Latinoamericano de Vocaciones.
Durante la segunda mitad de los 90 y los primeros 2000 lo eligieron director general de la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos. En 2013, se le nombró rector Pontificio del Colegio Español de San José en Roma.
Su vinculación con Barbastro arranca en 2014, cuando se le nombra para la dignidad que todavía hoy ostenta y que le hace acreedor del honor que hoy se le dispensa. Desde entonces, ha liderado la reestructuración geográfica y pastoral de un territorio, la Diócesis de Barbastro-Monzón, que es referencia para toda España, especialmente para diócesis de la España Vaciada.