El pasado sábado 7 de junio se llevó a cabo una nueva edición de la actividad “Papá llévame a pescar”, organizada en el coto de pesca de Baños de Benasque. A esta cita acudieron diez jóvenes acompañados por familiares y una representación significativa de monitores pertenecientes a la Asociación de Caza y Pesca de Barbastro. Durante toda la jornada, estos voluntarios se encargaron de asistir a los menores tanto en aspectos técnicos relacionados con la pesca como en la vigilancia y cumplimiento de medidas de seguridad.
Desarrollo de la actividad
El grupo se congregó a las nueve de la mañana en el aparcamiento de los Llanos de Benasque. Allí se reunieron tanto los participantes que se habían desplazado desde Barbastro como quienes ya se encontraban en la zona. En esta ocasión, la actividad contó también con la colaboración de la asociación de pesca local “La Garchola”. No obstante, la coincidencia de la fecha con un torneo de fútbol en Benasque redujo la participación de miembros de esta entidad.
Las condiciones meteorológicas iniciales fueron de nubosidad y temperaturas moderadamente bajas, aunque con el transcurso de las horas el tiempo se fue estabilizando. A raíz de las precipitaciones recientes, el caudal del río Ésera presentaba un volumen elevado. Esta circunstancia obligó a limitar el desarrollo de la actividad al tramo comprendido en los Llanos de Benasque. Así, se evitaron otras zonas como los llanos del Turpi, donde la presencia de barrancos afluentes aumentaba significativamente el nivel del agua, haciendo poco recomendable la pesca para menores.
El entorno natural de los Llanos, beneficiado por las lluvias de la temporada, ofrecía una imagen característica de alta montaña, con praderas verdes, cascadas activas y presencia de heleros. Este escenario atrajo no solo a los participantes en la actividad, sino también a numerosos senderistas que se detenían para observar la jornada de pesca.
Resultados de la competición
En cuanto a los resultados, las truchas respondieron favorablemente, siendo capturadas de forma constante durante toda la mañana. Todos los jóvenes pescadores lograron obtener alguna pieza. Esto permitió que la experiencia fuera completa para cada uno de ellos y facilitó una jornada fluida para los monitores que los acompañaban.
Finalizada la actividad de pesca, el grupo se dirigió nuevamente al aparcamiento para desplazarse al refugio de pesca de la asociación. En dicho espacio, los participantes fueron recibidos con una comida compuesta por paella y carne asada, ofrecida por la entidad anfitriona. Este momento fue utilizado para intercambiar impresiones sobre el desarrollo de la jornada.
Desde la organización se expresó un agradecimiento general a las familias que colaboraron con la actividad y al conjunto de socios que participaron como monitores. También se destacó el papel de Alfredo Lastanosa, presidente de la asociación “La Garchola”, quien estuvo presente durante toda la jornada y facilitó recursos logísticos y apoyo en la preparación del evento.
La jornada concluyó sin incidencias destacables, con una evaluación positiva por parte de los participantes y con la intención de repetir la actividad en futuras ocasiones.