Barbastro

Sol Otto: «La soledad de Ángela es compartida con sus recuerdos»

Sol Otto, abogada, presentó la que es su primera novela, La vida de Ángela, en el Museo Diocesano de Barbastro el pasado viernes

La vida de Ángela
Sol Otto en una imagen tomada por su hija. Foto: Natalia Gómez Otto
Ruth Zamora Zamora
03 mayo 2023

Sol Otto Oliván dedica su vida profesional al Derecho. Una de sus pasiones es la escritura, como demuestra en sus numerosos artículos en prensa. Tras adentrarse en la poesía y los cuentos, ahora presenta su primera novela, La vida de Ángela.

Había escrito poesía, cuentos… y esta es la primera novela

Sí, también había escrito ensayo, pero relacionado con lo mío con el derecho.

¿Qué le empujó a escribir una novela?

Yo he escrito siempre, otra cosa es publicar… Tengo cositas escritas que no he publicado. Y me gustaba la novela porque los cuentos me dejaron pensando que podía escribir algo más que el cuento, que se me hacía un poquito escaso. Y entonces empecé a escribir esta. Soy un poco disciplinada, me puse y empecé y salió esto.

Para quienes no hayan leído el libro, ¿qué les puede contar de La vida de Ángela?

Es la vida de una mujer que viene de un pueblo a una ciudad pequeña. El libro se divide en dos partes: la primera es su juventud y la segunda parte es la última etapa de su vida. Se condensa en las dos partes toda una vida. Lo que creo que puede resultar interesante es eso, el condensar en siete días de juventud y siete días de vejez toda la vida de esta mujer.

Cuando hablo de Ángela digo que no es una súper mujer. Es una mujer como muchas, pero no del montón. Lo que a mí me gusta de Ángela es que es una mujer decidida, tenaz, con rasmia, que es una palabra muy nuestra. Eso es lo que me parece más destacable de Ángela: sacar lo interesante de una vida que puede parecer corriente, lo que es una vida como muchas.

Ha comentado una de las características de la novela: dos partes, dividida cada una en siete días. ¿Ha sido lo más difícil: condensar la vida de alguien en 14 días?

Sí que es difícil, pero lo estoy viendo ahora. Cuando lo escribí, no es que me resultara sencillo, pero quizás lo veo más ahora. Es bastante complicado resaltar lo más importante de cada etapa. Elegir qué es lo que quieres contar para que defina una etapa en tan poco tiempo. Quiero ser modesta pero no excesivamente modesta, pero creo que eso lo he conseguido, el condensar bien las dos partes, lo más importante de cada etapa.

Es el relato de una mujer que llega del pueblo a una ciudad mediana, ¿es el reflejo de lo que fue la vida de una generación de mujeres?

Yo creo que sí, he querido transmitir eso. Y los que la han leído hasta ahora, me han dicho que sí, que entienden que no es una historia individual, sino que es la historia de muchas personas que estuvieron en esa situación y ese es el interés que tiene la novela: llegar de lo individual a lo universal, no tan universal, pero sí esa idea.

¿Qué hay de Sol Otto en La vida de Ángela?

Hay y no hay. Es ficción totalmente, lo que pasa es que es verdad que el espacio y el tiempo coinciden en parte, en parte, con el espacio y el tiempo de mi vida. Y con el lugar en que yo he vivido. Eso sí que es mío, mío; y no sólo mío, de muchos de mi generación. Es algo que puedo compartir con ellos. Y sí que es verdad también que mi madre era de un lugar pequeño y vino a un lugar más grande, eso también. Pero punto y aparte.

Ese lugar que para la gente de la zona es un plus para leer el libro: reconocer ciertos escenarios de Barbastro, en este caso.

Sí, sí. Además, algunas amigas estaban muy contentas de volver al espacio que ellas conocieron. Desde ese punto de vista sí creo que puede tener algo de interés. Pero las personas que lo han leído de fuera se hacen una idea de ese espacio y les gusta también, aunque no reconocen exactamente. Sí el que ese espacio era también muchos espacios en aquel momento de la historia.
Y puede costar ubicar, porque algunas calles han cambiado de nombre y además no cito nombres. Sí cito una, porque le han cambiado el nombre y me parecía más bonito el de antes.

¿Es la soledad el principal tema de la novela?

Pues, fíjate, no lo tengo claro. Es un elemento importante, desde luego, pero es una soledad de la que Ángela quiere salir. Quizás más en la última etapa, pero es una soledad compartida con sus recuerdos. Aunque está sola, como recuerda, tanto en la primera como en la segunda etapa, parece que está acompañada, que sigue con algo. Tampoco he querido transmitir esa soledad en plan deprimente, sino una soledad, no buscada de propósito, pero con la que se convive y a la que se adapta la protagonista.

Una buena reflexión: cómo, aunque estemos solos físicamente, nuestros recuerdos e inquietudes nos acompañan.

Sí, eso es bonito. La frase que cierra es “el secreto de una buena vejez no es otra cosa que un acto honrado con la soledad”, es de García Márquez. Me parece un buen resumen.

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