La travesía de Castillonroy ya está en mejores condiciones. El Departamento de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda del Gobierno de Aragón ha invertido 350.000 euros en esta obra. La actuación ha consistido en el refuerzo y ensanche de un tramo de 1’8 kilómetros de la A-2218.

Así, la travesía ha pasado a tener ocho metros de ancho en un tramo de 950 metros de carretera. Además, se ha mejorado el drenaje de la travesía de Castillonroy y se ha restituido la señalización horizontal y vertical. Las obras las ha realizado la empresa Arnó S.A.

El director general de Carreteras, Bizén Fuster, visitaba el pasado viernes estas obras de mejora de la travesía de Castillonroy. Fuster señalaba que las obras les «permiten profundizar en el acuerdo con la Diputación Provincial para que la variante que mejoró la DPH sea autonómica y el tramo de la travesía pase a ser gestionado por el municipio».

La actuación en la travesía de Castillonroy forma parte del Plan de Travesías del Gobierno de Aragón. «Tenemos una treintena de proyectos en diferentes fases de tramitación», explicaba Fuster. «Son obras que sin tener un presupuesto muy elevado suponen una mejora muy sustancial de la seguridad vial», añadía. Y es que a la Intensidad Media Diaria de estas carreteras se suma el intenso tráfico de los núcleos urbanos.