El Letra Corpórea retomó el camino del triunfo tras imponerse por 95-88 al Castelldefels en el encuentro disputado el pasado sábado en el pabellón Ángel Orús de Barbastro. El duelo permitió al conjunto dirigido por Quique López y Jordi Huguet cerrar una serie de resultados previos que habían generado una mala tendencia, especialmente por algunos finales ajustados que no habían caído de su lado. En esta ocasión, el equipo consiguió gestionar los últimos minutos con mayor control y asegurar una victoria que se les había resistido en jornadas anteriores.
El desarrollo del partido mostró fases diferenciadas. El primer cuarto concluyó 28-21 para el Letra Corpórea, un inicio en el que el conjunto local estableció el ritmo mediante un ataque constante y un buen aprovechamiento de las posesiones. Esa primera ventaja les permitió afrontar con margen el segundo periodo, que terminó igualado (23-23). El equilibrio en este tramo reflejó un intercambio continuo de posesiones productivas por parte de ambos equipos, sin que ninguno lograra romper la dinámica.
Segunda parte
Tras el descanso, el Castelldefels aumentó su acierto ofensivo y se adjudicó el tercer cuarto por 27-30. En ese momento surgieron algunas dudas en el pabellón, ya que en partidos recientes el Letra Corpórea había perdido la iniciativa en tramos similares. Sin embargo, el último periodo se desarrolló con un cambio de tendencia. El conjunto local cerró el parcial con un 17-14 que permitió recomponer la ventaja global y asegurar el triunfo. Durante esta fase aparecieron los lanzamientos exteriores de Rodrigo Ger y Unai Latorre, cuyas anotaciones desde la línea de tres puntos influyeron en el impulso final del equipo y contribuyeron a mantener la tensión competitiva en la grada.
A pesar del cierre favorable, los minutos finales estuvieron marcados por varias reclamaciones del Castelldefels hacia el cuerpo arbitral, lo que generó un ambiente tenso en la pista antes del bocinazo definitivo. No obstante, la situación no alteró el desenlace y el Letra Corpórea pudo certificar la victoria.
En el apartado individual, José Malo fue el máximo anotador del Letra Corpórea con 21 puntos. Miranda y Sartor aportaron 15 cada uno, completando un reparto equilibrado de responsabilidades ofensivas. En la lucha por el rebote, Malo volvió a destacar con siete capturas, igualando la cifra de Pardina. Rosàs sumó seis, lo que permitió al equipo mantener estabilidad bajo los aros en los momentos decisivos.
